Artesanía Tradicional Argentina
Artesanos y sus técnicas
ARTESANÍA TRADICIONAL ARGENTINA
Por Ximena González Eliçabe
Argentina posee una sólida tradición en artesanía. Sus antiguos habitantes supieron desarrollar gran habilidad para confeccionar utensilios cotidianos, herramientas, textiles y adornos personales, con gran criterio estético.
Desde épocas prehispánicas han perdurado tradiciones del hacer que atesoran el conocimiento de siglos de cultura y producción artesanal, enriquecidos con el aporte de los colonos europeos, y posteriormente con las oleadas inmigratorias de otras culturas.
Con la llegada de los inmigrantes las técnicas y los resultados estéticos se fueron transformando, y en algunos casos quedaron amalgamadas las culturas en objetos que representan a la identidad argentina.
Estos resultados se observan en la platería criolla, los textiles, los cueros, la cerámica, la madera, la imaginería religiosa.
Incluso actualmente en comunidades de pueblos originarios de Argentina se construyen una diversidad de objetos utilitarios, con las técnicas y motivos originales que aún perduran, en sus descendientes.
Por otra parte, la figura del Gaucho que representa al criollo o al mestizo, es un símbolo de esta fusión.
Tanto su atuendo, su poncho, sus bombachas, su rastra, su faja, sus botas de potro, como las herramientas que solía usar para los trabajos rurales, la caza y la defensa, lazos, boleadoras, facón (cuchillo grande y filoso), así como el apero para su caballo: espuelas, monturas, riendas, eran confeccionados por él mismo o por su mujer, con una finalidad netamente práctica.
En el folklore: Instrumentos musicales como el bombo y la guitarra, supieron acompañarlo en los fogones donde se reunían cantores y payadores. A los que se suman las quenas, erkes, y charangos en los Andes.
Piezas maestras
Las costumbres y la geografía se representan en las piezas, así se destaca la platería de Olavarría o San Antonio de Areco, Pcia. de Buenos Aires, los ponchos Pampa en la provincia homónima, los ponchos y mantas de vicuña en Catamarca, o los afamados ponchos y los tapices de los Valles Calchaquíes en Salta y Tucumán.
Las colchas santiagueñas, los tejidos en telar de San Juan, las randas de Tucumán o mallas correntinas, los tejidos de punto de lana cruda del litoral o de la region patagónica, los de pelo de llama de la Puna, así como las matras mapuches y los tejidos de fibra vegetal de chaguar de la zona del Chaco.
Los cueros curtidos de La Rioja y Córdoba, la soguería de la Provincia de Buenos Aires, de Mercedes Pcia. de Corrientes, de Lavalle del Valle de Uco en Mendoza, de Guachipas en Salta.
La cestería en isipó, caña y espartillo del litoral, los mimbreros del corredor del río Paraná, la cestería de palma blanca de los Tobas
Cerámica de muy buena calidad puede encontrarse en casi todo el País, pero por la transmisión de sus escuelas son destacadas las de Mendoza, Santa Fe, La Pampa, y por tradición cultural la del pueblo de Casira en Jujuy y la de los Valles Calchaquíes en Salta.
Los trabajos en piedra de rodocrosita o "rosa del Inca" en Catamarca, o con piedras de Wanda en Misiones.
La cuchillería de Tandil Pcia. de Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba, Corrientes, o la de La Pampa con empuñadura de asta de ciervo.
Las tallas en madera de palo santo de los Wichí en el chaco salteño, Formosa y Chaco.
Las máscaras con tallas de animales de los Chané.
Los objetos utilitarios en madera de lenga o ciprés en la zona cordillerana de la Patagonia.
Las imágenes talladas y policromadas de los santos y las tallas en hueso en Corrientes.
Afamados son los luthiers de Córdoba, Santiago del Estero y Mendoza.
Otros trabajos tradicionales que se están perdiendo en la actualidad son los hilados con huso y tortero tanto en algodón como en lana y camélidos; los muñecos en chala de choclo, los adornos y pequeños objetos en paja de trigo de Entre Ríos, el hilado y el tejido en seda autóctona de Ancasti Pcia. de Catamarca.
Origen y tradición de la artesanía argentina
El modo de vida del artesano, a ritmo tranquilo y en contacto con la naturaleza de su entorno refleja una manera de ser y una elección de vida. No obstante cada vez mas las nuevas generaciones reniegan del oficio de sus mayores y pretenden emigrar a los grandes centros urbanos en búsqueda de oportunidades.
Esto courre en parte porque en su origen, la artesanía en la Argentina cumplía el papel de autoabastecer a quienes la realizaban, pero no tiene una tradición de mercado como en otros pueblos de Latinoamérica (México o Bolivia por ejemplo).
Con esto queremos decir que los antiguos artesanos realizaban productos para su uso o consumo personal y a veces el de su comunidad, pero no estaban interesados en el mercadeo, ya que muchos de ellos comparten el tiempo dedicado a la producción artesanal con el de otras tareas cotidianas, algunos son pastores, peones de campo, agricultores, maestros u empleados municipales. Por lo tanto, su producción muchas veces no está pensada a una escala de mercado
Otras veces la artesanía desempeña el rol de expresión artística de la religiosidad popular, siendo un fuerte vínculo con el legado de sus antepasados.
Hoy en día las políticas de expansión turística ayudan a los artesanos a producir con calidad de una manera ordenada y de acuerdo a la demanda, a distribuir sus productos en ferias y exposiciones, buscando de esta manera el desarrollo sustentable de ciertas regiones donde la artesanía es parte de la forma de vida de sus pobladores.
De esta manera no sólo se generan atractivos turísticos y culturales que garantizan una fuente de ingresos para los lugareños, sino que se proteje la continuidad de oficios que de otra manera se perderían con el tiempo.